01/08/2016/RT
¿Por qué el Estado Islámico está contento con «la invasión turca del norte de Siria» y su guerra contra los kurdos?
Los milicianos del Estado Islámico están contentos con «la invasión turca del norte de Siria predicha hace mil quinientos años», revela el periodista Iván Yakovina en un nuevo artículo publicado en el portal Nóvoye Vremia.
El autor subraya que la operación turca contra el Estado Islámico en el norte de Siria va «sobre ruedas»: los terroristas abandonan sus posiciones sin ofrecer ningún tipo de resistencia.
Turquía y los kurdos: desconfianza extrema y objetivos opuestos
La situación se complica cuando las tropas turcas, al liberar una zona de los yihadistas, se encuentran con las Unidades de Protección Popular kurdas (YPG), que también luchan contra los islamistas.
El periodista explica que la guerra entre Turquía y los kurdos, que en teoría deberían cooperar en la lucha contra el EI, ha estallado a causa de «la extrema desconfianza mutua y los objetivos directamente opuestos de las partes». Los kurdos, que sueñan con crear su propio Estado, tratan de atravesar el territorio ocupado por el EI de este a oeste para llegar a Afrin, otro enclave kurdo. Por el contrario, el objetivo de Ankara es «levantar un muro» entre los dos cantones kurdos para que no se unan.
En este último conflicto enmarcado en la guerra siria «ganará el primero que rompa la resistencia del Estado Islámico en el norte del país», pronostica el analista. Sin embargo, agrega, la victoria no dependerá solo de la destreza y del equipo técnico de las partes, sino también en las acciones del Estado Islámico, que tiene su propio interés en esta historia.
La antigua profecía
El experto recuerda que la razón de ser y el propósito del Estado Islámico no es el bienestar de sus seguidores ni tampoco la conquista del mundo y la construcción de un califato mundial, sino «la aproximación del fin del mundo, con la posterior plaza en el paraíso para sus partidarios».
Según las antiguas profecías de los textos sagrados islámicos, el fin del mundo será precedido por la «batalla final» entre las fuerzas del ‘califato’ y las de ‘Roma’.
Si lo del ‘califato’ está claro para los terroristas, ha habido discrepancias sobre cuáles serían las fuerzas de ‘Roma’. Mientras algunos islamistas creían se trata del Occidente cristiano, otros apuntaban a Turquía como la sucesora de Bizancio (el Imperio romano de Oriente). El lugar de la batalla es definido con bastante precisión: la ciudad de Dabiq en el norte de Siria, situada justo entre los dos enclaves kurdos.
«Todo listo para la batalla final»
Dado que las tropas turcas ya han comenzado la invasión y están a unos centenares de kilómetros de Dabiq, la cantidad de los partidarios de la versión ‘turca’ «ha aumentado significativamente», apunta el periodista.
Según Yakovina, ahora los terroristas «están realmente seguros de que falta una semana o incluso unos pocos días hasta el inicio de la última batalla».
La escena de la batalla está lista (han estado fortaleciendo Dabiq durante un año y medio) y una de las partes (los propios islamistas) ya están en su lugar, mientras la segunda está a punto de llegar.
Una mala noticia para los kurdos
Es por ello que los terroristas están listos para abandonar sus posiciones y retirarse hacia Dabiq ante las tropas turcas, generándoles la ilusión de una lucha fácil, revela el periodista, que estima que todo esto es «una muy mala noticia para los kurdos», ya que los yihadistas no están dispuestos a hacer lo mismo ante ellos, porque, simplemente, «no los necesitan en Dabiq».
«El sueño del apocalipsis, que ha nutrido la existencia del Estado Islámico desde su creación, está a punto de hacerse realidad», advierte el analista.
Una tentación difícil de resistir
En este contexto, el periodista advierte de lo «muy difícil» que será para Ankara «resistir la tentación de llevar a sus tropas hasta Dabiq», ya que, en primer lugar, sería un paso bastante fácil y triunfal y, en segundo lugar, la eventual victoria en esta ciudad acabaría con las esperanzas de los kurdos sobre su propio Estado.
Por lo tanto, «tanto desde el punto de vista militar como geopolítico, la realización de este objetivo no solo parece una tarea necesaria, sino también bastante real», opina Yakovina.
«Tal vez sería algo parecido al apocalipsis»
Sin embargo, el periodista recuerda que el inicio de la mítica batalla por Dabiq «se vería como un milagro por muchos musulmanes de todo el mundo», y no solo confirmaría «el carácter sagrado del Estado Islámico, sino que también evidenciaría «la llegada inminente e inevitable del fin del mundo».
Para el analista, «resulta difícil de imaginar lo que puede comenzar en el mundo si decenas o incluso cientos de millones de personas están totalmente seguros de que la historia humana está a punto de terminar».
«Tal vez en el planeta empezaría algo de verdad parecido al apocalipsis», concluye Yakovina.
[staff_social]
Deja una respuesta