31/10/2024/france24
La DANA en España deja al menos 155 personas muertas y la cifra puede seguir en ascenso, a medida que avanzan las operaciones para hallar a los desaparecidos.
La última cifra se refiere solo a los cuerpos hallados en la Comunidad Valenciana, la más afectada, aunque por el temporal Castilla-La Mancha, reportó el miércoles al menos dos fallecidos, y Andalucía informó sobre una víctima mortal.
La letal cifra aumentó luego de que las autoridades encontraran este 31 de octubre otros cuerpos de personas que estaban reportadas como desaparecidas.
En las últimas horas, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ratificó que aún hay «muchos desaparecidos», lo que prevé que el número de víctimas mortales siga en aumento.
El número de muertos asciende mientras España vive este jueves 31 de octubre el primero de los tres días de luto oficial, declarados un día antes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
12 provincias continúan en alerta por precipitaciones, con especial incidencia en Tarragona (noreste) y Castellón (este), donde hay nivel naranja por acumulaciones cercanas a 40 litros en una hora o 100 litros en 12 horas, según las últimas predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Sánchez ofrece recursos para hallar a los desaparecidos «por tierra, mar y aire»
Desde Valencia, una de las zonas más afectadas a donde llegó el presidente del Gobierno para reunirse con las autoridades locales y poner a disposición la ayuda y recursos del Estado, Sánchez remarcó como prioridad el hallazgo de los desaparecidos.
Nuestro compromiso por tierra, mar y aire, el tiempo que haga falta para encontrar a las personas desaparecidas
«Quiero reafirmar el compromiso del Gobierno de España con la Comunidad Valenciana, solidarizarnos de nuevo con las víctimas, con sus familiares y trasladar también el compromiso de todas las unidades que pertenecen al sistema de protección civil nacional, nuestro compromiso por tierra, mar y aire, por todos los medios, el tiempo que haga falta y con todos los recursos posibles para encontrar a las personas desaparecidas», subrayó el líder del PSOE.
En este sentido, Sánchez remarcó la necesidad de salvaguardar las vidas, por lo que pidió a los habitantes de las zonas afectadas permanecer en sus viviendas y seguir las recomendaciones de la Agencia Estatal de Meteorología y de los cuerpos de seguridad.
«La DANA no ha terminado, no ha acabado, la Aemet esta lanzando señales de advertencia en determinadas provincias de la Comunidad Valenciana, también de otros territorios de España y, por tanto, pido y ruego atender a las recomendaciones de la Aemet y de los cuerpos de seguridad del Estado», resaltó el presidente del Gobierno.
Asimismo, Sánchez ratificó que en el Consejo de Ministros del próximo martes, su Administración declarará como zona catastrófica a la Comunidad Valenciana y los territorios afectados.
Los recursos movilizados se centrarán tanto en la búsqueda y rescate, como n la reconstrucción de las zonas golpeadas, remarcó Sánchez.
Así amanecieron las zonas más afectadas
Horas antes, en la oscuridad, con calles tapizadas en barro y carros volcados, amanecía la Comunidad Valenciana y zonas de Castilla-La Mancha y Andalucía. Allí los rescatistas buscan encontrar sobrevivientes y víctimas de las recientes inundaciones.
El Comité de Crisis sigue evaluando la situación y alrededor de 1.000 soldados se unieron a la Policía y los bomberos para buscar cadáveres luego de que la lluvia fuera inclemente durante unas pocas horas del martes en la ciudad oriental de Valencia y la región circundante. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Chiva, al oeste de Valencia, registró el martes 491 mm de lluvia en sólo ocho horas, casi el equivalente a un año.
Con 40 personas muertas, Paiporta, en los suburbios de Valencia, quedó devastada, informaron las autoridades locales, que mencionaron entre las víctimas a una madre y su bebé arrastradas por la corriente.
El acceso de los rescatistas a todos los centros urbanos fue restablecido el miércoles por la tarde, por lo que equipos de rescate han sacado a los supervivientes de los tejados con helicópteros y registrado casas, incluso con el agua hasta el cuello.
Al amanecer de este jueves, decenas de miles de hogares seguían sin electricidad ni agua potable. Unas 155.000 viviendas se quedaron sin electricidad en la región de Valencia debido a la tormenta, dijo la empresa energética Iberdrola, que ya ha repuesto el suministro a 42.000 de los afectados.
Además, muchas carreteras estaban bloqueadas por los cientos de automóviles y camiones arrastrados por torrentes repentinos. El transporte ferroviario y aéreo están gravemente afectados también. La línea de alta velocidad entre Valencia y Madrid quedará suspendida durante al menos cuatro días, anunció la autoridad de infraestructuras ferroviarias de Adif.
El jefe del gobierno regional de Valencia, Carlos Mazón, informó que los servicios de emergencia llevaron a cabo 200 rescates en tierra y 70 evacuaciones aéreas el miércoles. En cuanto al número de muertos, todavía se están recuperando cadáveres, pero los servicios de emergencia hablaron de 92 en Valencia, dos en la vecina Castilla-La Mancha y otra víctima fatal en Andalucía, en el sur.
Los supervivientes -según las autoridades de la región de Valencia- están siendo albergados en alojamientos temporales, como estaciones de bomberos.
En la actualidad, más de 447 personas de las poblaciones más afectadas por las inundaciones siguen alojadas en albergues y el 112 ha atendido, desde las 22:00 horas del miércoles, 21 casos de abastecimiento de suministros de necesidad.
«España llora»
En Ribarroja del Turia, en las afueras de la ciudad de Valencia, la concejala Esther Gómez dijo que los trabajadores quedaron atrapados durante la noche en un polígono industrial «sin posibilidad de rescatarlos» debido al desbordamiento de los arroyos. «Ha pasado mucho tiempo desde que esto sucedió y estamos asustados», dijo.
El Rey Felipe VI se mostró «devastado» por el desastre y ofreció «su más sentido pésame» a las familias de las víctimas.
«Toda España llora con todos vosotros No os abandonaremos», señaló el miércoles el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a las víctimas y sus familias en un discurso televisado.
La catástrofe no se puede dar por superada y «desplegaremos todos los recursos necesarios durante el tiempo que sea necesario para que podamos recuperarnos de esta tragedia», añadió.
Desde el Gobierno español, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, aseguró que las predicciones y análisis funcionaron «perfectamente» pero «los mecanismos de respuesta» no incorporaron de manera adecuada las alertas.
«Los mecanismos de predicción y de análisis han funcionado perfectamente, han sido capaces de prevenir con días de antelación lo que va a suceder; sin embargo, los mecanismos de respuesta posteriores han sido los que no han incorporado adecuadamente esos mensajes de alerta», dijo desde la COP16 de Biodiversidad que se celebra en Cali, Colombia.
La inundación más mortífera
La Unión Europea activó su sistema de satélites Copernicus para ayudar a coordinar los equipos de rescate españoles, dijo en Bruselas la jefa de la Comisión de la Unión Europea, Ursula von der Leyen, quien también ofreció utilizar su mecanismo de protección civil para enviar más refuerzos.
Esta inundación es la más mortífera en España desde 1973, cuando se estimó que al menos 150 personas murieron en las provincias sudorientales de Granada, Murcia y Almería.
Fenómenos meteorológicos extremos como la tormenta que azotó Valencia, según los científicos, son cada vez más intensos, duran más y se producen con mayor frecuencia a consecuencia del cambio climático.
Estos extremos «pueden abrumar la capacidad de las defensas y los planes de contingencia existentes para hacer frente a la situación, incluso en un país relativamente rico como España», dijo Leslie Mabon, profesora titular de sistemas medioambientales en la Open University de Gran Bretaña.
«Esos fenómenos naturales con los cuales estábamos acostumbrados a convivir están adquiriendo unas dimensiones que son desconocidas y que los mecanismos de respuesta no están adecuados para esas dimensiones», añadió Morán.
Las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología muestran que las lluvias torrenciales de las últimas horas comienzan a perder intensidad y extensión, aunque todavía 12 provincias continúan en alerta.
En Valencia se mantiene el aviso naranja (riesgo importante) en la provincia de Castellón, especialmente zonas del litoral e interior norte y por tormentas, según la Aemet.
Cataluña (noreste), muy castigada también por la DANA, sigue con alerta naranja en el prelitoral y en el litoral sur de la provincia de Tarragona; en el resto de la comunidad, salvo Lérida, el aviso es amarillo (riesgo para ciertas actividades por acumulaciones entre 30 y 20 litros en una hora y por tormentas.
En Andalucía (sur), las lluvias también ceden tras la fuerte intensidad de las últimas horas y solamente las provincias de Cádiz, Sevilla y Huelva siguen en alerta amarilla por precipitaciones, que dejarán entre 15 y 20 litros en una hora.
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