19/09/2024/RT
El valor del grano se ha elevado en aproximadamente 40 % este año, fenómeno que obedece a una combinación de circunstancias desfavorables para el cultivo.
Los precios del café continúan aumentando a niveles récord y la situación no parece mejorar. A inicios de esta semana, los futuros del grano subieron hasta en 4,8 % para alcanzar su nivel más alto desde 2011, de acuerdo con Bloomberg.
El medio señala que el valor del café se ha elevado aproximadamente en 40 % este año, fenómeno que obedece a toda una combinación de circunstancias desfavorables: inflación en los mercados, inclemencias meteorológicas exacerbadas por el cambio climático, escasez de suministros.
El repunte de los precios está siendo impulsado por la situación en Brasil, principal productor general de café y en particular del tipo arábica, muy utilizado en la producción de café soluble. En el país amazónico, las perspectivas de producción se ven truncadas por la peor sequía en décadas, que podría arruinar la cosecha 2024-25. A comienzos de septiembre, el Centro Nacional de Monitoreo y Alertas de Desastres Naturales (Cemaden) informó que algunos municipios de Minas Gerais, principal estado productor de Brasil, llevan alrededor de 150 días sin lluvias.
Entretanto, en Vietnam, líder en producción del tipo robusta —también utilizado para café instantáneo—, se han obtenido cosechas más pequeñas en las últimas dos temporadas, indicó en julio el diario The Business Times. Sus caficultores han sufrido igualmente las consecuencias de sequías prolongadas que podrían afectar la siguiente cosecha, que debería iniciarse a finales de octubre. Según Bloomberg, los precios del robusta han subido durante más de una semana, llegando este lunes a un incremento de 4,2 %.
Colombia, el tercer mayor productor de café en el mundo, ha intensificado las actividades del rubro. Sin embargo, en los primeros meses del año sufrió asimismo escasez de lluvias, con las consiguientes sequías en varias regiones, como consecuencia del fenómeno El Niño, que además provoca un aumento en la infestación de broca y ha dañado algunos sembradíos.
En marzo, la Federación Nacional de Cafeteros colombianos advirtió que esa situación reduciría la producción de este año en cerca de 1,2 millones de sacos de café, lo que representaría una baja de 8,4 % frente a la cosecha del año pasado, que fue 14,2 millones de sacos.
De acuerdo con un reporte de julio de la Organización Internacional del Café, se estima que la producción del país suramericano para el periodo 2023/2024 sea de 12,5 millones de sacos. Al respecto, el diario Portafolio señala que esta previsión va en línea con la presentada por el Departamento de Agricultura de EE.UU., que calcula que la producción rondará los 11,5 millones de sacos.
Un apestoso competidor
En 2021, una inesperada helada afectó entre uno y dos millones de sacos de la cosecha brasileña de 2022-23, y obligó a los compradores del grano a emigrar a otros mercados, como Vietnam.
En los últimos años, los agricultores vietnamitas han atravesado dificultades para adaptar el cultivo a los cambios climáticos, los desastres naturales, a veces bajo condiciones extremas, y muchos han optado por reemplazar los cafetales por cultivos de durián, una controvertida fruta sujeta a restricciones de transporte y en los hoteles de varios países debido a su fuerte olor.
La participación del durián vietnamita en los mercados de China casi se duplicó entre 2023 y 2024, y algunos estiman que el cultivo es cinco veces más lucrativo que el café, recoge un reciente informe.
Si bien el aumento de producción de esta fruta ha representado un cambio en la oferta cafetalera, un estudio de 2022 muestra que el cambio climático podría provocar que para 2050 se reduzcan al 50 % las áreas que actualmente son adecuadas para el cultivo del grano.
Deja una respuesta