El Crepuscular

Noticias (Tabloide Edición Digital)

El infierno que vivió una pareja de California con sus dos hijas pequeñas para escapar de los piratas en el Amazonas

13/11/2017/Yahoo

El capitán Dinei dos Santos estaba llenando la hoja de ruta de su barco en el Amazonas mientras el sol comenzaba a esconderse cuando escuchó gritos y vio manos agitándose frenéticamente desde las turbulentas aguas del río.

Se trataba de una pareja y dos niñas que nadaban apoyados en una tabla de surf. Dos Santos supo de inmediato quiénes eran: una familia estadounidense reportada como perdida horas antes en las noticias. Adam y Emily Harteau, y sus hijas Colette, de 6 años y Sierra, de 3, subieron de inmediato al ferry.

“Estaban muy, muy asustados, hambrientos y cubiertos por picaduras de insectos”, contó luego Dos Santos al diario The Wall Street Journal. “Subieron a bordo y se colocaron a una esquina. Creo que solo querían sentirse seguros”.

Los miembros de la tripulación y otros pasajeros del ferry de Dos Santos le dieron a la familia ropa para reemplazar sus prendas andrajosas, así como la comida tradicional de arroz, frijoles y carne de res.

Los Harteau fueron llevados a la ciudad Breves, donde pasaron casi 24 horas en un hospital local. Adam fue tratado por una leve reacción alérgica; Emily tuvo una insolación y una lesión en la pierna de un accidente anterior; y sus hijas fueron tratadas por fiebre, deshidratación, picaduras de insectos e insolación.

Así terminó una aventura emprendida por los Harteau en 2012, cuando se dispusieron a viajar por Sudamérica en su camioneta Volkswagen Westfalia. Recaudaron 16.301 dólares en la plataforma Kickstarter y con el #vanlife hashtag, sumaron miles de seguidores en las redes sociales pendientes de cada paso en su aventura aparentemente feliz.

El idílico experimento terminó cuando la familia se disponía a regresar a California. Abordaron con sus pertenencias el buque Andorinha el 29 de octubre, pero este fue atacado por unos seis hombres que llevaron el barco a tierra y confinaron a los Harteaus y la tripulación en un remolcador. Después de pasar varias horas como rehenes y amenazados a punta de pistola, la familia decidió huir.

En medio de la noche, cuando los ladrones aparentemente estaban descargando la carga del barco, Harteau tomó un kit de supervivencia y su tabla de surf y se deslizó en el río Jacaré Grande -infestado de caimanes- con su familia.

“Pensé que estaban muertos” – dijo luego al Journal Ieda Dias, una enfermera de 56 años en el cercano pueblo de Porto dos Días, donde se enteró por primera vez de la familia desaparecida-. “Nadie nada en esas aguas”.

Pero así lo hicieron. Utilizando la tabla como flotador, la familia de cuatro personas cruzó una milla y media a nado hasta la orilla opuesta del río. Desde allí caminaron alrededor de 6 millas en los tres días siguientes a través de la jungla repleta de jaguares, serpientes, caimanes e insectos venenosos. Se escondieron de las personas con las que se cruzaron, temiendo que pudieran tener vínculos con los piratas.

En una publicación de Instagram el domingo, los Harteaus posaron con su tabla de surf de color verde olivo y las autoridades brasileñas frente a un avión tras su odisea de 100 horas.

“No podríamos estar más extasiados al decir que ESTAMOS VIVOS”, declaró la familia a 132.000 seguidores en la cuenta @openroad en Instagram. “Estamos muy agradecidos por todos sus buenos deseos en estos tiempos difíciles y queremos transmitir nuestro amor por Brasil, que se mantiene incluso después del infierno que sobrevivimos”.

(Marcelo Lelis/Secretary of State for Public Security and Social Defense via AP)

Las autoridades dicen que la piratería y el tráfico de drogas proliferan en el Amazonas. Solo en el estado de Pará, la policía registró 641 ataques de piratas desde 2011 hasta el mes pasado, y se cree que muchos otros nunca fueron denunciados.

Para empeorar las cosas, la policía cree que los piratas a veces son instigados por las comunidades locales, donde los empobrecidos residentes buscan comprar mercancía a precios reducidos. La mayor parte de la carga que fue robada del Andorinha consistía en cajas de ropa y harina de mandioca, un alimento básico local. La policía local dijo el martes que un sospechoso había sido arrestado por el ataque de pirata a los Harteau.

[staff_social]

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *