17/12/2025/Victor Gómez, El Crepuscular/bloomberglinea/la nacion/europa press/the objective/ la opinion/
La economía venezolana enfrenta un nuevo golpe inflacionario. Según un índice semanal compilado por Bloomberg News, la tasa de inflación anual alcanzó el 556% en los 12 meses hasta el 17 de diciembre, muy por encima del 219% registrado en junio y del 45% en 2024.
El salto inflacionario refleja la fragilidad de la economía venezolana, marcada por la escasez de divisas, la dolarización parcial y la dependencia de importaciones. La presión se intensificó en los últimos meses a medida que el presidente estadounidense, Donald Trump, reforzó su campaña para aislar financieramente al régimen socialista de Caracas, endureciendo sanciones y limitando el acceso del país a mercados internacionales.
Comparación histórica de la inflación de Venezuela. En el 2024, con una inflación anual de 45%, con señales de estabilización. En Junio del 2025, en 219%, tras un repunte por restricciones externas. Diciembre 2025, con 556%, el nivel más alto desde la hiperinflación de 2018-2019.
Los salarios en bolívares se han vuelto prácticamente simbólicos, obligando a la mayoría de los ciudadanos a recurrir al dólar o a criptomonedas para transacciones diarias. La brecha entre el tipo de cambio oficial y el mercado negro se amplía, generando distorsiones en precios básicos. El gobierno de Nicolás Maduro acusa a Washington de “guerra económica”, mientras que la oposición señala la falta de reformas internas como el verdadero detonante.
Economistas advierten que, sin acceso a financiamiento externo y con sanciones más severas, Venezuela podría enfrentar un nuevo ciclo de hiperinflación. La única salida, señalan, sería una combinación de reformas estructurales internas y negociaciones internacionales que permitan aliviar la presión sobre el sistema financiero.
La inflación venezolana, que ya supera el 500%, refleja tanto la debilidad estructural de la economía como el impacto de las tensiones geopolíticas. El país se encuentra nuevamente en el centro de un escenario de crisis que amenaza con profundizar la precariedad social y la inestabilidad política.
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