09/11/2024/Jorge Ebro, el nuevo herald
Los Navegantes del Magallanes aprovecharon una larga travesía para colarse en la final del Choque de Gigantes. Después de 12 entradas tensas y extenuantes este sábado, el equipo de Venezuela será recordado como el primero que selló su boleto a la jornada decisiva del domingo.
Tito Polo recibió un boleto con las bases llenas para forzar el triunfo de los Navegantes 3-2 ante las Estrellas Orientales, que se marcharon del loanDepot en espera de lo que pueda ocurrir en el choque nocturno, donde los dos clubes de Puerto Rico chocarían por el segundo pase al juego decisivo.
Siguiendo la tónica del encuentro de la noche anterior, que se mantuvo empatado y decidió sobre la hora, este partido entre Navegantes y Estrellas se sostuvo sobre un marcador igualado de una solitaria anotación, ambas propiciadas por la vía del error.
Durante las primeras cuatro entradas, los lanzadores abridores lograron un dominio absoluto sobre las alineaciones rivales, pero en la quinta se rompió la magia cuando Aeverson Arteaga conectó una línea sólida, pero de frente, que no pudo ser capturada por Julio Pablo Martínez en el jardín derecho.
Ese error abrió la puerta a la anotación inicial del Magallanes, que siguió con la amenaza y que, de no haber sido por una tremenda atrapada de Magneuris Sierra en el bosque central, habría ampliado el marcador de manera preocupante para los dominicanos.
Pero si esa pifia trajo problemas a los de Quisqueya, los venezolanos también beberían ese mismo veneno luego de que Diego Rincones no pudiera asegurar un elevado inofensivo de Miguel Sanó en la sexta entrada, que trajo para el plato la del empate.
Tras esos dos momentos, ambos equipos tuvieron varias oportunidades de marcar carreras, pero fallaron de manera estrepitosa como le sucedió a las Estrellas Orientales que colocaron un corredor en tercera sin out en la décima entrada y llenaron las bases, pero se estrellaron en su intento de anotar en tres hombres consecutivos.
Como si fuera poco, los Navegantes tampoco pudieron anotar con corredores en primera y tercera con un solo out y se quedaron con las ganas de pisar el plato en la parte baja de la décima entrada.
Un inning más tarde, un doblete de Euribiel Ángeles rompió un empate a una carrera para que los dominicanos tomaran al mando de manera momentánea, pero luego los venezolanos volvieron a nivelar el juego con un elevado de sacrificio.
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