18/02/2017/Vix/LR
Recuerdo un chiste en el que Miguelito y Mafalda están sentados en el cordón de la vereda y Mafalda le pregunta qué espera de la vida y, extendiendo las manos, Miguelito le contesta que no tiene pretensiones, que lo que la vida le dé va a estar bien.
En el momento en que termina la frase, la hoja seca de un árbol cae sobre la mano abierta de Miguelito y este exclama: “¡Amarreta!”
Este sencillo chiste nos enseña una valiosa lección acerca de nuestros deseos, de cómo desear de manera equivocada nos puede conducir a recibir lo que no esperamos, o directamente lo que no queremos.
Para que me entiendas mejor, te voy a dar un ejemplo simple. Supongamos que odias tu trabajo, que estás harto de tu jefe y compañeros, y no pasa un día sin que desees “no tener que ir más a trabajar”. Entonces una mañana llegas al trabajo y resulta que estás despedido. O sales a la calle y tienes un accidente que te deja imposibilitado de por vida para trabajar. O te mueres.
Fuerte, ¿eh? Pues eso es lo que pasa cuando deseamos las cosas sin consciencia. Cuando simplemente nos dejamos llevar por nuestros deseos sin refinar, sin analizar, simplemente siguiendo el impulso y, especialmente, sin estructurar propiamente nuestro deseo de manera que sea beneficioso para nosotros y para los demás, o que por lo menos no dañe a otros.
Un antes y un después de Venus retrógrado
Por suerte cada año y medio Venus, el planeta de la atracción, el deseo y el amor, retrograda durante 40-42 días, brindándonos la oportunidad de revisar qué es lo que realmente queremos de la vida, no vaya a ser que nos llevemos una sorpresa desagradable con el resultado.
Este año Venus retrogradará entre los signos de Piscis y Aries, que representan justamente finales y principios, lo que iniciará un ciclo completamente nuevo en la forma en que deseamos, atraemos y amamos.
Piscis es el signo de los finales, del “let go and let God”, o sea de dejar ir y dejar a Dios, el destino o el Universo guiarnos sabiamente hacia lo que es mejor para nosotros. Porque tenemos que recordar que, en su sabiduría, la vida no nos da lo que queremos sino lo que necesitamos.
Así que mientras Venus retrograde en Piscis estaremos dejando ir sueños que ya pasaron su fecha de caducidad, deseos y amores que eran buenos y valiosos para quienes solíamos ser, pero que ya no están alineados con quienes somos ahora.
Y lamento ser portadora de “malas” noticias, pero tengo que advertirte que esto puede doler. Ver cómo se mueren tus sueños e ilusiones más queridas no es de esas situaciones para las que solemos estar preparados. Y el peor error que puedes cometer es tratar de aferrarte a tus viejos sueños, amores y deseos.
Cuando a algo o a alguien le llegó la hora, lo mejor es reconciliarse con la idea de que esos deseos tienen que morir y fluir con los acontecimientos, so pena de sufrir más y hacer las cosas más difíciles para todos los involucrados. Si hay algo que todos tenemos que aprender en esta vida es que hay un momento de luchar por nuestros sueños, y otro de dejarlos ir porque no son para nosotros. Y este es el momento en que te toca aprender a dejar ir.
La buena noticia es que inmediatamente después Venus entra en Aries, el signo de los nuevos comienzos, y nos invita a soñar nuevos sueños, encontrar nuevos amores y avivarnos por nuevos deseos. Esa es la promesa eterna del ciclo en la Tierra: después de la Vida viene la Muerte, seguida por un nuevo renacimiento de la Vida. Un ciclo de Vida/Muerte/Vida ad infinitum.
Así que cuidado con lo que deseas…
Con esto vuelvo al principio: cuidado con lo que deseas. Porque estaremos plantando las semillas de amor, deseo y sueños para un nuevo ciclo, que iremos cosechando en los próximos meses y años por venir.
Por eso te invito a aprovechar la energía de Venus retrógrado para dejar ir todos aquellos deseos que ya no tienen cabida en tu vida actual siendo la persona que eres ahora, y profundizar en qué es lo que realmente quieres y por qué quieres lo que quieres, cuál es la motivación profunda que te mueve.
Así podrás escoger sueños, amores y deseos que estén realmente alineados con quién eres, y no luchando por sueños que no son tuyos o, peor aún, simplemente esperando que lo que deseas te caiga del cielo, para luego darte cuenta que no era lo que querías. ¡Que la sabiduría y el amor te acompañen en esta temporada de finales liberadores y principios auspiciosos!
Alejandra Guerrero es astróloga y escritora. Estudió Astrología Evolutiva, especializándose en Astrología del Despertar de la Conciencia (Astrology of Awakening), y su experiencia incluye haber trabajado con la célebre astróloga Susan Miller en su proyecto de horóscopos en español. Apasionada del crecimiento y la superación personal, utiliza la astrología como una herramienta inspiradora para conocernos a nosotros mismos, liberar nuestro potencial, vivir una vida más auténtica y alcanzar nuestros sueños.
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