El Crepuscular

Noticias (Tabloide Edición Digital)

«Imposibles de controlar»: ¡qué sucederá si los drones pasan al «lado oscuro»?

21/01/2016/Reuters / Kim Kyung Hoon

Tanto grupos terroristas como insurgentes, criminales y ‘lobos solitarios’ ya han demostrado capacidad de utilizar drones en ataques y recopilación de inteligencia.

Los vehículos aéreos no tripulados tienen un potencial infinito para hacer que este mundo sea un poco mejor: pueden ayudar a la Policía, buscan a personas desaparecidas, graban vídeos increíbles e incluso salvan vidas. Además, son cada vez más eficientes, más rápidos, más fáciles de manejar y más accesibles para los ciudadanos comunes. Pero, ¿qué sucederá si estas máquinas pasan ‘al lado oscuro’? Esta es la pregunta a la que intenta responder el nuevo informe de la agencia de análisis Open Briefing.

«Se estima que alrededor de 200.000 drones de uso civil se están vendiendo en todo el mundo cada mes. Aunque actualmente son caros, incluso los drones más avanzados, capaces de llevar sofisticados equipos de imagen y cargas significativas, están fácilmente disponibles para el mercado civil», reza el informe del grupo, que advierte de que los vehículos aéreos no tripulados ya representan un gran riesgo debido a sus capacidades y disponibilidad generalizada. Pero, además, la evolución de los vehículos no tripulados terrestres y marinos «está abriendo nuevas vías a explotar para los grupos hostiles».

Amenaza terrorista

Una de las cuestiones más candentes de hoy en día es el riesgo que representan los vehículos aéreos no tripulados en manos de los grupos terroristas. En este sentido, Open Briefing cita varios casos de uso de drones por parte del Estado Islámico. Sin embargo, hace hincapié en que, de momento, la organización ha utilizado estos dispositivos más bien para fines propagandísticos o para recabar datos de inteligencia.

«Hay barreras significativas para planificar y llevar a cabo un ataque terrorista importante de cualquier tipo», señalan los autores del informe.

Sin embargo, prosiguen, «se informa de que el Estado Islámico está obsesionado con el lanzamiento de un ataque sincronizado de múltiples drones contra un gran número de personas con el fin de recrear los horrores del 11-S».

Otros grupos de riesgo

Por otro lado, «los drones tienen el potencial de convertirse en componentes significativos de arsenales insurgentes», advierte el documento, que explica que los grupos rebeldes a menudo tienen las mismas capacidades e intenciones que organizaciones terroristas, «pero no se enfrentan a los mismos obstáculos reglamentarios y de aplicación de la ley».

«Obtener capacidades de reconocimiento y ataque aéreo, terrestre y marino marcaría un cambio decisivo para muchos grupos insurgentes», vaticina la publicación.

«Los drones tienen el potencial de convertirse en componentes significativos de arsenales insurgentes»

Además, añade Open Briefing, hay muchos ejemplos de personas que utilizan aviones no tripulados «con fines que van más allá del uso autorizado y aceptado, lo que sugiere escenarios para futuros ataques de ‘lobos solitarios'».

Otros colectivos que podrían utilizar drones con fines malévolos son los grupos del crimen organizado, las corporaciones (para obtener ventajas comerciales o espiar) o incluso grupos de activistas, indica el informe, aunque destaca que estos últimos «claramente no representan una amenaza del mismo tipo o magnitud que los otros grupos de amenaza analizados».

¿Cómo contrarrestarlo?

Para contrarrestar esta amenaza, la agencia aconseja utilizar todo un conjunto de contramedidas reguladoras (restringir la capacidad de los aviones disponibles en el mercado; limitar la capacidad de los grupos e individuos hostiles para adquirirlos, etc.), pasivas (sistemas de alerta temprana; bloqueo de la señal) y activas (básicamente, destruir aviones hostiles con armas cinéticas o sistemas de defensa de láser).

«Sin embargo, tales contramedidas no son infalibles», admite el informe, agregando que es posible incluso que las propias contramedidas sean utilizadas por los grupos de amenaza contra drones policiales o militares.

«La tecnología de la guerra de control remoto es imposible de controlar; la mejor defensa es hacer frente a los conductores de la amenaza en primer lugar», concluye Open Briefing.

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *