16/05/2017/EFE
La reunión de cancilleres de la Celac programada para el próximo 20 de mayo en República Dominicana para abordar la crisis en Venezuela fue «pospuesta» para una fecha aún por definir, informó hoy el Gobierno de El Salvador, que ejerce la presidencia pro témpore del grupo.
Las causas del aplazamiento de la XIV Reunión de Ministros de Relaciones Exteriores de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) no fueron precisadas en la breve misiva salvadoreña, que se limitó a decir que se informará de la nueva fecha cuando esta esté fijada.
San Salvador fue sede el pasado 2 de mayo de una cita de cancilleres de la Celac, solicitada por Venezuela, a la que asistieron 26 de los 33 países miembros y que culminó con un llamado al diálogo en el país suramericano.
El canciller de El Salvador, Hugo Martínez, explicó entonces que el encuentro se planteó para hallar soluciones a la crisis, pero que solo se logró el «ablandamiento» del tema y un «insumo» para la reunión ordinaria de la Celac que estaba prevista para el próximo sábado en República Dominicana, y que este martes quedó aplazada.
Se esperaba que en la cita de República Dominicana un grupo de cinco países invitados por el Gobierno de Venezuela para facilitar un acercamiento entre las partes en conflicto comenzaran a sentar las bases del diálogo, según explicó el pasado viernes el canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, invitó a El Salvador, Nicaragua, San Vicente y las Granadinas, República Dominicana y a Uruguay a incorporarse al diálogo político en el país petrolero.
Novoa dijo el viernes pasado en Montevideo que los países que estarán encargados de facilitar el diálogo entre la oposición y el Gobierno venezolano mantendrían una reunión en la próxima cumbre de la Celac.
Manifestó que se está armando «un grupo de países» que ayudará a que haya diálogo entre ambas partes y a raíz de eso mantuvo contacto con otros cancilleres y con integrantes de la oposición venezolana al respecto.
El diálogo político entre Gobierno y oposición comenzó en octubre de 2016 y tuvo la mediación del Vaticano y de los expresidentes Leonel Fernández (República Dominicana), Martín Torrijos (Panamá) y del exjefe del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.
La oposición abandonó las negociaciones después de poco más de un mes acusando al chavismo de incumplir los acuerdos alcanzados, por lo que las negociaciones entraron en una etapa de «revisión» a solicitud de los acompañantes.
Unas 42 personas han muerto desde que una ola de manifestaciones a favor y en contra del Gobierno se desarrollan en Venezuela en los últimos 46 días, de acuerdo a los reportes de la Fiscalía y las autoridades.
Las protestas se iniciaron después de que el Tribunal Supremo, acusado de servir al chavismo, se atribuyera las funciones de la Asamblea Nacional, controlada por los opositores, y aunque la decisión fue revocada en medio de la presión internacional, la oposición insiste en denunciarlo.
La escalada de la tensión se recrudeció cuando Maduro anunció el inicio de un proceso constituyente para redactar una nueva Carta Magna como la «única» manera de conseguir la paz, lo que sus detractores ven como un golpe de Estado y una manera perpetuarse en el poder.
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