Nueve alimentos que hidratan mejor que el agua

23/09/2016/Infobae

Una de las razones por las que es tan crucial mantenerse hidratado es que el cuerpo humano está compuesto por una enorme mayoría de agua, es como una esponja. Este líquido comprende el 75 por ciento del peso corporal en los recién nacidos, el 55 por ciento en los ancianos y es esencial para la homeostasis celular y el funcionamiento de los órganos en general.

Un cuadro de deshidratación ocurre cuando el cuerpo no tiene suficiente líquido para llevar a cabo sus funciones básicas. Es por eso que, para evitar que ocurra, el orgaismo pone en marcha un trabajo de señalización: aparece la sed, la boca y los labios se resecan e incluso pueden sentirse mareos y fatiga, lo que puede impactar en el funcionamiento del cerebro y la memoria a corto plazo. Después de unos días sin agua, el humano enfrenta también un gran riesgo de muerte.

Sin embargo, con el fin de promover una hidratación saludable, la comunidad médica sostuvo durante mucho tiempo que con dos litros de agua se cumple la cuota diaria de líquido. El problema que surge es que no todo el mundo disfruta de beber agua. De tal modo, construir el hábito se torna difícil. La buena noticia es que hay vida más allá de la botella de agua y que algunos alimentos, que están formados en casi un 100 por ciento de agua pueden ser el complemento ideal para una hidratación correcta.

1. Agua de coco

El coco, una de las frutas tropicales más conocidas, puede ser consumida en diferentes momentos de su proceso de maduración. Cuando está verde, posee dentro entre 0,2 y un litro de agua con grandes propiedades hidratantes. A medida de que el coco madura, se torna marrón y las fibras de la cáscara se empiezan a desprender, el agua se convierte por dentro en pulpa y luego es utilizada para preparar leche de coco.

El agua que contienen los cocos verdes, que es de color transparente, ligeramente blanca, es rica en azúcares, vitaminas, minerales, enzimas, aminoácidos, citoquininas, fitohormonas y electrolitos como el potasio, magnesio, calcio, sodio y fósforo. A su vez, es muy baja en calorías y no tiene contenidos grasos. Por todas estas cualidades, se dice que el agua de coco combate los signos de la vejez, ayuda a la digestión y mejora la piel. Algunos estudios realizados sobre las propiedades del agua de coco han demostrado que las citoquininas que se encuentran entre sus componentes tienen grandes propiedades antioxidantes, anticancerígenas y antitrombóticas.

El agua de coco tiene muchos beneficios para la salud (iStock) © Proporcionado por THX Medios S.A. El agua de coco tiene muchos beneficios para la salud (iStock)

2. Manzana

Comer una manzana al día aporta las cantidades necesarias de fibra que el cuerpo necesita. La manzana contiene un 86 por ciento de agua y es una de las frutas con mayor poder antioxidante. Por lo tanto, disminuye el crecimiento de las células cancerosas, reduce el riesgo de desarrollar Alzheimer y disminuye el riesgo de contraer enfermedades del corazón.

3. Vegetales de hojas verdes

Verduras como la espinaca y la lechuga son refrescantes porque aportan un 95 por ciento de agua al cuerpo, son ricas en vitamina A y C, esenciales para el cuidado de la piel, y poseen minerales, antioxidantes, y nutrientes que ayudan a la desintoxicación del cuerpo y eliminan las toxinas e impurezas de la piel. Por este motivo son de gran ayuda en la prevención del cáncer, la preservación de la memoria y la visión.

Las hojas verdes como la espinaca y la lechuga tienen un 95 por ciento de agua (iStock) © Proporcionado por THX Medios S.A. Las hojas verdes como la espinaca y la lechuga tienen un 95 por ciento de agua (iStock)

4. Kiwi

El kiwi, además de ser una fruta deliciosa para consumir en licuados y ensaladas, es una de las más completas en cuanto a beneficios para la salud y el cuidado de la belleza de la piel.

Esta fruta tiene un 83 por ciento de agua, y aporta más del doble requerimiento diario de vitamina C. Además, gracias a que contiene fibra, es excelente para regular el colesterol y la presión sanguínea, disminuye el riesgo de coágulos y baja los niveles de lípidos sanguíneos.

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