12/08/2025/Victor Gómez, El Crepuscular/Notimérica/Estrella Digital/eldebate.com
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron este martes que un ataque aéreo “selectivo” en la ciudad de Deir al-Balá, en el centro de la Franja de Gaza, resultó en la muerte de cinco presuntos terroristas palestinos que, según el ejército israelí, se hacían pasar por trabajadores humanitarios de la organización internacional World Central Kitchen (WCK).
Los individuos viajaban en un vehículo marcado con el logotipo de WCK y vestían chalecos amarillos, típicos de los trabajadores humanitarios. Luego, de un trabajo de inteligencia militar, el ejército afirmó que el vehículo representaba una “amenaza inmediata” para sus tropas terrestres, por lo que fue atacado por la Fuerza Aérea.
Según el comunicado oficial, los atacados “explotaban cínicamente el estatus y la confianza dada a las organizaciones de ayuda” para encubrir actividades armadas.
La ONG, fundada por el chef español José Andrés, negó cualquier vínculo con el vehículo o las personas involucradas. En un comunicado, WCK condenó enérgicamente el uso indebido de su emblema, señalando que “esto pone en peligro a los civiles y a los trabajadores humanitarios”.
El uso de símbolos de organizaciones humanitarias para encubrir operaciones militares constituye una violación grave del derecho internacional humanitario, según las Convenciones de Ginebra. Este incidente reaviva el debate sobre la protección de la ayuda humanitaria en zonas de conflicto, especialmente en Gaza, donde la crisis humanitaria se agrava día a día.
El Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás, reportó 100 nuevas muertes en las últimas 24 horas, elevando el total a 61.599 fallecidos desde el inicio de la ofensiva israelí en octubre de 2023.
Israel ha rechazado estas cifras, acusando a Hamás de manipular datos como parte de una “campaña orquestada para engañar” a la población.
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